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martes, 6 de noviembre de 2018
miércoles, 13 de marzo de 2013
COMO VEN LOS GATOS
Visión binocular
Visión binocular: sus ojos están orientados hacia adelante, para poder hacer un cálculo correcto y tridimensional de la distancia, como buen cazador. Además, tienen un campo de visión de 186º, lo cual es un gran angular que le permite controlar todo su entorno.
Pupilas
Pupila: tienen una extraordinaria visión de noche porque pueden abrir su pupila en forma redonda al máximo para aprovechar la poca luz del ambiente, pero de día también tienen una buena visión ya que pueden cerrar la pupila dejando una fina rendija. Cuando están asustados o excitados también dilatan totalmente la pupila.
Tapetum lucidum. Es un “espejo” situado detrás de su retina que le permiten aprovechar al máximo la escasa luz por la noche. (ver más). Los gatos pueden ver con la sexta parte de luz que nosotros.
Tercer párpado
Tercer párpado. La membrana nictitante, es un delgado tejido situado por detrás de los párpados, y que parpadea diagonalmente sobre el ojo. Sirve para mantener el ojo muy lubricado por lágrimas y para protegerlo. Cuando un gato está enfermo tiende a cubrir sus ojos con este tercer párpado.
Los colores. Los gatos, como nosotros, tienen dos tipos de receptores: los bastoncillos para ver con poca luz y los conos para diferenciar los colores. Si bien, el gato tiene 25 bastoncillos por cada cono y nosotros 4 bastoncillos por cada cono, por eso el gato tiene menor capacidad para diferenciar colores pero mucha más capacidad para ver con poca luz. Los colores que mejor percibe son el verde y azul, pero no el rojo. Pero bueno, yo tampoco diferencio bien algunos colores porque soy daltónico:
Visión normal
Visión daltonico
Y como dice catsandroids cuidado cuando a pleno día tienen las pupilas totalmente abiertas... a saber si lo que han visto. Cuando están así, nosotros les decimos: ¡¿dónde vas con esas pupilotas?!
OIDO DEL GATO
Las orejas de los gato son orientables gracias a los más de 20 músculos que tiene en el pabellón auditivo, de esta manera puede percibir sonidos con detalle y manifestar su estado de ánimo.
Muchas veces podemos ver que nuestro gato tiene la cabeza orientada hacia nosotros pero si escucha un leve sonido en otro sitio rápidamente gira sus orejas como una parabólica para percibir mejor el sonido, y además lo suele hacer quietos para escuchar mejor.
Los gatos perciben sonidos con frecuencias de hasta 60 kHz, cuando por ejemplo el limite máximo de frecuencias audibles por los perros está entre 15 y 35 kHz y en los humanos entre 15 y 20 kHz. De esta manera los gatos perciben sonidos que al ser ultrasónicos nosotros no los percibimos, como por ejemplo ciertos chillidos de los roedores.
Además de un oído exquisito, los gatos poseen un desarrollado sentido del equilibro que les permite saltar, caer de pie y moverse con gran agilidad. Para ello, tienen tres conductos semicirculares en el oído interno, con vellosidades en sus paredes que detectan la posición del fluido y partículas de calcio que llenan estos conductos que están dispuestos en ángulos diferentes.
martes, 6 de noviembre de 2012
ARENA PARA GATOS
Produce menos olores, es una arena más respetuosa con el medio ambiente y dura más. Estas son algunas de las razones por las que os recomendamos la arena biodegradable.
Hace un tiempo hicimos una COMPARACIO DE ARENA En su momento, Kato y Saya estaban utilizando arena de sílice.
Aunque la arena de perlas de sílice nos dio buenos resultados, prometimos probar la arena biodegradable. Su carácter más ecológico nos llamó mucho la atención.
Desde hace aproximadamente un mes utilizamos una arena biodegradable vegetal y el resultado ha sido más que positivo.
La manera en que estos residuos son tratados es importante. En nuestro caso, los fabricantes de la arena aseguran que no utilizan componentes químicos, por lo que se puede tirar a los contenedores de basura orgánica o incluso al inodoro.
Nuestros gatos hacen un alto uso de su bandeja y con las arenas que habíamos probado antes en seguida se notaba un fuerte olor a heces. Con la arena ecológica esa peste prácticamente ha desaparecido.
La arena biodegradable es la que más nos dura, ya que tanto los pipis como las cacas de los gatos forman grumos con la arena.
Aunque en la arena de sílice es fácil detectar qué granos estaban utilizados, cuesta más separarlos del resto y acabas por tirar arena no utilizada. En el caso de la arena biodegradable, es más sencillo deshacerse únicamente de lo que está usado, y no perjudica a la arena restante.
Tanto la arena biodegradable como la de sílice suelen ser de las más caras del mercado, pero la biodegradable acaba siendo más económica por lo aprovechable que es.
La arena ecológica es limpia y no genera polvo. Aunque a veces Kato monta unos estropicios tirando la arena fuera, la arena apenas ensucia.
La cantidad de arena que se utiliza a diario y se desecha es muy alta, por lo que es importante resaltar que la arena biodegradable es una buena alternativa respetuosa con el medio ambiente.
Como veis, no hemos hecho publicidad de ninguna marca, aunque nosotros hemos probado una en concreto y estamos muy contentos.
No se trata de animaros a que compréis una u otra arena, sino a invitaros a contemplar la arena biodegradable como una alternativa. Esperemos que os dé tan buenos resultados como a Kato y Saya, que se adaptaron muy rápidamente a su nueva arena.
Hace un tiempo hicimos una COMPARACIO DE ARENA En su momento, Kato y Saya estaban utilizando arena de sílice.
Aunque la arena de perlas de sílice nos dio buenos resultados, prometimos probar la arena biodegradable. Su carácter más ecológico nos llamó mucho la atención.
Desde hace aproximadamente un mes utilizamos una arena biodegradable vegetal y el resultado ha sido más que positivo.
¿De qué está hecha la arena biodegradable?
Existen varios tipos, pero la mayoría tienen un alto componente de residuos vegetales. Los más comunes son: madera de pino, papel reciclado, trigo, maíz y cáscaras.La manera en que estos residuos son tratados es importante. En nuestro caso, los fabricantes de la arena aseguran que no utilizan componentes químicos, por lo que se puede tirar a los contenedores de basura orgánica o incluso al inodoro.
¿Qué es lo mejor de este tipo de arena para gatos?
El control del olor es muy positivo, puesto que los desechos de los gatos se mezclan con el olor propio de la arena. El resultado es un aroma suave similar al de la madera.Nuestros gatos hacen un alto uso de su bandeja y con las arenas que habíamos probado antes en seguida se notaba un fuerte olor a heces. Con la arena ecológica esa peste prácticamente ha desaparecido.
La arena biodegradable es la que más nos dura, ya que tanto los pipis como las cacas de los gatos forman grumos con la arena.
Aunque en la arena de sílice es fácil detectar qué granos estaban utilizados, cuesta más separarlos del resto y acabas por tirar arena no utilizada. En el caso de la arena biodegradable, es más sencillo deshacerse únicamente de lo que está usado, y no perjudica a la arena restante.
Tanto la arena biodegradable como la de sílice suelen ser de las más caras del mercado, pero la biodegradable acaba siendo más económica por lo aprovechable que es.
La arena ecológica es limpia y no genera polvo. Aunque a veces Kato monta unos estropicios tirando la arena fuera, la arena apenas ensucia.
La cantidad de arena que se utiliza a diario y se desecha es muy alta, por lo que es importante resaltar que la arena biodegradable es una buena alternativa respetuosa con el medio ambiente.
Como veis, no hemos hecho publicidad de ninguna marca, aunque nosotros hemos probado una en concreto y estamos muy contentos.
No se trata de animaros a que compréis una u otra arena, sino a invitaros a contemplar la arena biodegradable como una alternativa. Esperemos que os dé tan buenos resultados como a Kato y Saya, que se adaptaron muy rápidamente a su nueva arena.
5 COSAS QUE DEBES SABER SOBRE LA COMIDA DEL GATO
Conoce los conceptos clave para la alimentación de tu gato: el gato come carne, combina pienso y comida blanda, el gato come cuando quiere o cuando tú establezcas, el gato debe beber agua y la etapa de vida del gato importa para su alimentación.La mayoría de marcas comerciales de comida para gatos tienen una clasificación muy definida para cada una de las etapas de vida del gato.
Pero cuando nosotros nos convertimos en papás de nuestros gatos (Kato y Saya) nos preguntamos: ¿y cuándo deja de ser bebé nuestro gatito?, ¿cuándo debe cambiar de tipo de comida?, ¿qué comida es mejor? Indagando un poco más vimos que la alimentación del gato tiene una serie de fundamentos básicos.
Los gatos comen carne de vaca, de pollo, algo de carne de cerdo e incluso pescado blanco, y se recomienda que toda esta carne esté cocinada.
Además de la carne, el gato necesita hidratos de carbono, vitaminas y minerales.
¿Es mejor el pienso o las latas (comida húmeda y blanda)? Si bien es un tema que trataremos en profundidad más adelante, lo más conveniente es combinar ambos tipos de comida. Sobre todo por si algún día se ve obligado a tener que comer solamente de un tipo.
En nuestro caso solemos darles pienso (tiene más contenido nutritivo) pero nuestros gatos enloquecen con la comida blanda, así que cada 2-3 días le mezclamos el pienso con comida de lata.
Si quieres, puedes optar por dejar el plato lleno de comida o racionar el alimento de tu gato. Si prefieres controlar más lo que come tu gato, la recomendación es que cuando es bebé le des comida 3 veces al día, y en una edad más avanzada lo reduzcas a 2 veces al día.
Nuestro amigo felino es un animal de costumbres, así que ponle la comida en el mismo sitio y siempre sobre la misma hora.
Las dos primeras fuentes de agua para el gato son las que podemos reforzar y tener en cuenta.
Si el gato come latas (comida húmeda y blanda), suele cubrir sus necesidades de agua, por lo que el gato apenas beberá.
Si el gato come pienso (comida seca) deberá cubrir prácticamente el 100% del agua que necesita bebiendo.
En cualquiera de los casos, el gato suele ser un animal bastante delicado, ponle agua limpia y fresca (entre 5-18 ºC).
Consulta la tabla de comida segun la etapa de vida del gato para ver en qué momento se encuentra tu gato y qué comida debe consumir.
Otra cosa es que el gato tenga necesidades alimenticias especiales (por ejemplo, un gato obeso); en ese caso pregunta a tu veterinario qué comida de gato le conviene más.
Pero cuando nosotros nos convertimos en papás de nuestros gatos (Kato y Saya) nos preguntamos: ¿y cuándo deja de ser bebé nuestro gatito?, ¿cuándo debe cambiar de tipo de comida?, ¿qué comida es mejor? Indagando un poco más vimos que la alimentación del gato tiene una serie de fundamentos básicos.
1) El gato come carne
El más destacado es que el gato es principalmente carnívoro, por lo que la dieta del gato debe ser alta en carnes.Los gatos comen carne de vaca, de pollo, algo de carne de cerdo e incluso pescado blanco, y se recomienda que toda esta carne esté cocinada.
Además de la carne, el gato necesita hidratos de carbono, vitaminas y minerales.
2) El gato come pienso o comida húmeda
La comida de gato comercial (pienso o comida húmeda) suele cumplir con los requerimientos nutricionales que necesita el gato. Son alimentos balanceados que tienen las cantidades necesarias para cada etapa del gato.¿Es mejor el pienso o las latas (comida húmeda y blanda)? Si bien es un tema que trataremos en profundidad más adelante, lo más conveniente es combinar ambos tipos de comida. Sobre todo por si algún día se ve obligado a tener que comer solamente de un tipo.
En nuestro caso solemos darles pienso (tiene más contenido nutritivo) pero nuestros gatos enloquecen con la comida blanda, así que cada 2-3 días le mezclamos el pienso con comida de lata.
3) El gato come cuando quiere
A diferencia de los perros (al menos nuestra experiencia nos dice que el perro suele arrasar con todo lo que le pongas en el plato o más), los gatos suelen administrarse la cantidad de comida que ingieren y consumen lo que energéticamente necesitan.Si quieres, puedes optar por dejar el plato lleno de comida o racionar el alimento de tu gato. Si prefieres controlar más lo que come tu gato, la recomendación es que cuando es bebé le des comida 3 veces al día, y en una edad más avanzada lo reduzcas a 2 veces al día.
Nuestro amigo felino es un animal de costumbres, así que ponle la comida en el mismo sitio y siempre sobre la misma hora.
4) El gato bebe agua
Hay muchas cosas que se deben tener en cuenta sobre cómo el gato adquiere el agua que necesita, pero en resumen el gato tiene 3 fuentes de agua: comiendo, bebido y con metabolismos propios.Las dos primeras fuentes de agua para el gato son las que podemos reforzar y tener en cuenta.
Si el gato come latas (comida húmeda y blanda), suele cubrir sus necesidades de agua, por lo que el gato apenas beberá.
Si el gato come pienso (comida seca) deberá cubrir prácticamente el 100% del agua que necesita bebiendo.
En cualquiera de los casos, el gato suele ser un animal bastante delicado, ponle agua limpia y fresca (entre 5-18 ºC).
5) El gato come diferente según la etapa de vida
Las necesidades nutricionales del gato varían según su edad, algo que conocen perfectamente las marcas comerciales.Consulta la tabla de comida segun la etapa de vida del gato para ver en qué momento se encuentra tu gato y qué comida debe consumir.
Otra cosa es que el gato tenga necesidades alimenticias especiales (por ejemplo, un gato obeso); en ese caso pregunta a tu veterinario qué comida de gato le conviene más.
VACUNAS DE LOS GATOS
El proceso de vacunación de los gatos debe empezar cuando dejan de recibir leche materna. Cuando el gato es adulto, se deben reforzar algunas vacunas cada cierto tiempo (aproximadamente 3 años). Conoce qué vacunas son relevantes y cada cuánto hay que vacunar a tu gato.
De todos modos, es importante que conozcamos qué es imprescindible y qué no para detectar cuando nuestro veterinario nos está diciendo la verdad, o cuando en realidad solo quiere beneficiarse económicamente.
Antes de empezar el proceso de vacunación, el veterinario realizará una serie de pruebas y auscultará al gato. Depende de dónde proceda el gato y de cómo vea su salud, es posible que deba realizar pruebas como el test de inmunodeficiencia felina y el de la leucemia, para descartar estas enfermedades graves.
Otro proceso habitual previo a las vacunas es la desparasitación externa e interna del gato.
Con el diagnóstico correcto del gato, y teniendo en cuenta muchos factores como la procedencia y el estilo de vida que va a tener, se determina su calendario de vacunación.
Existen otras vacunas que se están poniendo “de moda”, como la vacuna contra la PIF que, bajo nuestra experiencia personal, desaconsejamos que sea inyectada.
A continuación os detallamos cada una de las vacunas mencionadas.
Vacunar a los gatitos cuando están recibiendo leche materna está desaconsejado, porque dicha leche disminuye el efecto de la vacuna hasta incluso eliminarlo por completo.
Tras el destete, la primera vacuna que se aplica a los gatos es la denominada trivalente felina (contra la panleucopenia felina, la calicivirosis felina y la rinotraqueitis vírica felina).
Pasadas unas 3 o 4 semanas se vuelve a vacunar al gato de la trivalente felina, como refuerzo.
Estas vacunas iniciales son siempre obligatorias, aunque el gato no vaya estar en contacto con otros gatos o no vaya a salir nunca al exterior.
En algunas comunidades autónomas españolas, la vacuna contra la rabia es obligatoria en los gatos.
Es importante que tu veterinario sea de confianza y que te cuente el motivo real por el que te aconseja vacunarlo sobre estas enfermedades. Si realmente existe un riesgo tangible, es correcta la vacunación. Pero no lo hagas solo por miedo, sin razón alguna.
Si bien muchos veterinarios aconsejan repetir la revacunación cada año, varios estudios recientes demuestran que en la mayoría de los casos el efecto de la vacuna dura unos 3 años.
La práctica de la vacunación cada 3 años se está extendiendo en Estados Unidos y otros países, mientras que en España aún hay una tendencia fuerte a la revacunación anual.
Asegúrate de que tu veterinario es serio y pídele información acerca del período de revacunación que te aconseje para tu gato adulto.
En Cosas de Gatos no pretendemos desmentir las opiniones de los veterinarios, pero esperamos que con este artículo podáis reconocer cuando el diagnóstico del veterinario es determinante, o cuando se trata de la opinión de alguien poco profesional que mira solamente por sus intereses económicos.
Destacar también que los gatos con enfermedades o con un estado de salud complicado posiblemente deben recibir otro tipo de vacunas o un calendario distinto.
Finalmente comentar que hay personas que no vacunan a sus gatos, tratándoles con otros métodos alternativos. Cualquier opinión nos parece válida siempre que se garantice el bienestar del gato, y que se esté mirando en todo momento por su correcta salud.
Siempre debes consultar al veterinario
Antes de hablar de qué vacunas debe llevar tu gato, debemos tener claro que quién llevará el control es su veterinario.De todos modos, es importante que conozcamos qué es imprescindible y qué no para detectar cuando nuestro veterinario nos está diciendo la verdad, o cuando en realidad solo quiere beneficiarse económicamente.
Antes de empezar el proceso de vacunación, el veterinario realizará una serie de pruebas y auscultará al gato. Depende de dónde proceda el gato y de cómo vea su salud, es posible que deba realizar pruebas como el test de inmunodeficiencia felina y el de la leucemia, para descartar estas enfermedades graves.
Otro proceso habitual previo a las vacunas es la desparasitación externa e interna del gato.
Con el diagnóstico correcto del gato, y teniendo en cuenta muchos factores como la procedencia y el estilo de vida que va a tener, se determina su calendario de vacunación.
Calendario de vacunación más común
- A partir del destete (edad aproximada: 2-3 meses): trivalente felina
- 3 o 4 semanas después de la primera vacuna (edad aproximada: 4 meses): refuerzo de la trivalente felina
- No siempre obligatoria, antes del año: rabia y leucemia (dos dosis con intervalos)
- Al cumplir 1 año: refuerzo de la trivalente felina y, si procede, refuerzo de leucemia y rabia
- Aproximadamente cada 3 años (gato adulto): refuerzo de las vacunas recibidas
Existen otras vacunas que se están poniendo “de moda”, como la vacuna contra la PIF que, bajo nuestra experiencia personal, desaconsejamos que sea inyectada.
A continuación os detallamos cada una de las vacunas mencionadas.
Las primeras vacunas de los gatitos
Cuando los gatitos toman la leche de su madre, no solo están recibiendo alimentación y nutrientes. En el calostro (primera leche materna de la gata) se encuentran las defensas necesarias para que el gatito esté suficientemente protegido durante aproximadamente los 2-3 primeros meses de vida.Vacunar a los gatitos cuando están recibiendo leche materna está desaconsejado, porque dicha leche disminuye el efecto de la vacuna hasta incluso eliminarlo por completo.
Tras el destete, la primera vacuna que se aplica a los gatos es la denominada trivalente felina (contra la panleucopenia felina, la calicivirosis felina y la rinotraqueitis vírica felina).
Pasadas unas 3 o 4 semanas se vuelve a vacunar al gato de la trivalente felina, como refuerzo.
Estas vacunas iniciales son siempre obligatorias, aunque el gato no vaya estar en contacto con otros gatos o no vaya a salir nunca al exterior.
Vacunas contra la rabia y la leucemia
En función de si el veterinario detecta un alto riesgo de estas enfermedades, te aconsejará vacunarlo con dos dosis con intervalos contra la rabia, o bien contra la grave enfermedad de leucemia.En algunas comunidades autónomas españolas, la vacuna contra la rabia es obligatoria en los gatos.
Es importante que tu veterinario sea de confianza y que te cuente el motivo real por el que te aconseja vacunarlo sobre estas enfermedades. Si realmente existe un riesgo tangible, es correcta la vacunación. Pero no lo hagas solo por miedo, sin razón alguna.
Vacunas del gato adulto
Una vez el gato adquiere su madurez inmunológica, hacia el año de vida, el minino suele recibir recordatorios de las vacunas anteriormente mencionadas, como la trivalente.Si bien muchos veterinarios aconsejan repetir la revacunación cada año, varios estudios recientes demuestran que en la mayoría de los casos el efecto de la vacuna dura unos 3 años.
La práctica de la vacunación cada 3 años se está extendiendo en Estados Unidos y otros países, mientras que en España aún hay una tendencia fuerte a la revacunación anual.
Asegúrate de que tu veterinario es serio y pídele información acerca del período de revacunación que te aconseje para tu gato adulto.
En Cosas de Gatos no pretendemos desmentir las opiniones de los veterinarios, pero esperamos que con este artículo podáis reconocer cuando el diagnóstico del veterinario es determinante, o cuando se trata de la opinión de alguien poco profesional que mira solamente por sus intereses económicos.
Destacar también que los gatos con enfermedades o con un estado de salud complicado posiblemente deben recibir otro tipo de vacunas o un calendario distinto.
Finalmente comentar que hay personas que no vacunan a sus gatos, tratándoles con otros métodos alternativos. Cualquier opinión nos parece válida siempre que se garantice el bienestar del gato, y que se esté mirando en todo momento por su correcta salud.